Hace dos años, cuando tenía 17, sentía ganas de crear algo que superase mis anteriores obras, quería crear algo diferente. Mis tíos abuelos un día me enseñaron una caja llena de fotos antiguas de los años 40-50 y en adelante, encontré fotografías que me fascinaron, pero hubo una de ellas que me llamó mucho la atención. Era una fotografía de mi tatarabuela, sentada en una silla y con un vestido largo, frente a las galerías de su casa en Udalla, Cantabria, que a demás es la casa de mis tíos; la fotografía se tomó justo donde vi la foto por primera vez. Al día siguiente volví a su casa, y tomé diferentes fotografías a mis tios, inspirándome finalmente en la fotografía que encontré y utilizando a mi tía abuela Toya como modelo, representándola elegante, sonriente, y frente a la galería de su casa. Quise realizar la obra en este tamaño tan grande para que de algún modo pareciera que "te puedes meter dentro". Quise realizar pequeños detalles, que quizá solo se ven si te acercas a la obra.